ACCESORIOS Y PREPARACIÓN. - Necesitas una baraja corriente, una baraja de forzaje de tres
montones que tenga el mismo dorso que la otra y un dispensador de cartas. La baraja de forzaje consiste en tres montones de, pongamos, 16 cartas cortas cada uno, uno de nueves de diamantes, otro de jotas de picas y un último de doses de corazones, con una carta larga entre cada montón y una tercera en la posición inferior. Las tres cartas largas también son iguales, por ejemplo, tres Q de corazones. Añade, para terminar, dos cartas largas a la baraja: un 7 de picas en la posición inferior y un 4 de diamantes en la superior. Tienes, entonces, una baraja de 53 cartas que irá dentro del dispensador que habrás colocado en la parte trasera de la mesa o de la silla. Prepara la baraja normal colocando el 9 de diamantes, la J de picas y el 2 de corazones en la parte superior. REALIZACIÓN.- Toma la baraja ordinaria y mézclala por hojeo. Fuerza el 9 de diamantes, la J de picas y el 2 de corazones, por ese orden. Pide a los espectadores que introduzcan sus cartas de nuevo entre las demás y que barajen. Recupera luego las cartas, vuelve al escenario y haz una recapitulación de lo que se ha hecho hasta el momento, haciendo hincapié en que los tres espectadores han mezclado la baraja. Corta varias veces mientras hablas, con cuidado de que no se vea ninguna carta. Aproxímate a la mesa (en la que se encuentra el dispensador) preparado para hacer el cambio de baraja. Empuja la mesa un poco hacia adelante y, ya con la baraja de forzaje en la mano, muestra como por casualidad la carta inferior (el 7 de picas). “Ahora voy a pasar las cartas”(mira la carta inferior).”Espero que nadie haya escogido precisamente esta de aquí” (retira el 7 de picas y déjalo cara abajo en la mesa). "Voy a dar cartas de una en una” (toma el 4 de diamantes dejando que el público la vea al pasar). "Dejándolas a continuación en la mesa” (deja el 4 de diamantes en la mesa). "Ahora, el espectador que eligió la primera carta, si es tan amable de decir "Alto" en el momento en que sienta el impulso de hacerlo". A todo esto, tú estás ya dando cartas (nueves de diamantes) lentamente en la mesa, por lo que, cuando el espectador diga "Alto" tendrás en la mano esa carta, la elegida. Si el espectador tardara demasiado en detenerte, ralentiza tú también el ritmo al que das las cartas. Puedes ser tan lento como él y, de este modo, no tener nunca que llegar a la primera carta larga. Puedes dar más emoción al juego diciendo: ¿quieres esta carta o la siguiente? o ¿Deseas cambiar y decir alto en otro momento?, etc. Antes de mostrar la carta. Antes de voltearla, pide al espectador que nombre su carta elegida. Haz un salto hasta la primera carta larga antes de pasar al segundo espectador y haz lo mismo con éste y con el tercero. Si, por descuido, se ve en algún momento la carta inferior, la misma Q de corazones demuestra que no ha habido manipulación alguna. Una adición posterior a la versión de Robert Houdin hacía que el espectador tocase un timbre en lugar de decir alto. Para escena, la anterior descripción de este efecto es, sin duda la mejor. El inconveniente que tiene es que no es apta para realizar de cerca. Para ese caso has de seguir las instrucciones de Al Baker que ofrecemos a continuación.
jueves, 24 de enero de 2008
ACCESORIOS Y PREPARACIÓN
en 8:41
Etiquetas: Trucos cartas
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